Día 20 | 1.25.25 | —• Eddie Hickle •— Orlando Baptist Church, Salmo 95: 1-11

Mientras reflexionas sobre este pasaje de las Escrituras, dedica un momento para elevar tu oración siguiendo el modelo de ACAS.
Adoración: ¿Qué en este pasaje te inspira a rendir honra?
Confesión: ¿Qué en este fragmento te invita a reconocer tu falta?
Acción de gracias: ¿Qué aspecto de este pasaje te invita a expresar gratitud?
Súplica: ¿Qué en este pasaje te invita a buscar la ayuda de Dios?

21 días de oración 🙏🏻 Un recorrido por los salmos.

1 Vengan, celebremos con alegría al Señor, celebremos con alegría a la Roca de nuestra salvación. 2 Entremos en su presencia con gratitud; alabémosle con cantos. 3 Porque el Señor es un Dios grande, un Rey majestuoso sobre todos los dioses. 4 En su mano están las profundidades de la tierra, suyas son las cumbres de los montes. 5 Suyo es el mar, él lo creó; sus manos formaron la tierra seca. 6 Vengan, adoremos y postrémonos; arrodillémonos ante el Señor nuestro Creador. 7 Porque él es nuestro Dios, y nosotros somos el pueblo de su prado, ovejas bajo su cuidado. Si ustedes hoy escuchan Su voz, 8 no endurezcan su corazón como en Meribá, como aquel día en Masah en el desierto, 9 donde sus padres me yentaro; me pusieron a prueba, aunque habían visto mis obras. 10 Durante cuarenta años estuve disgustado con esa generación; Y dije: «Son un pueblo de corazón extraviado, que no conocen mis caminos». 11 Por eso juré en mi ira: «No entrarán en mi reposo».

Este himno de alabanza nos invita a elevar nuestras voces, a expresar gratitud y a rendir homenaje al Señor, nuestro gran Dios. Estos actos nos ayudan a tocar las fibras de nuestro corazón hacia Él, renovando nuestra fe en su esencia con la promesa de acceder a su descanso.

El salmista nos invita a entonar un canto que brota del corazón, elevándonos sobre la “roca de nuestra salvación”. ¡Podemos expresar un clamor jubiloso por nuestra condición como seres que han sido redimidos!

Porque hemos sido rescatados, ahora tenemos la oportunidad de servir a Dios como nuestro gran Rey y gobernante. No solo hemos sido salvados por el Señor, sino que Él también nos creó y nos sostiene a cada uno de nosotros, así como al resto de la creación, en Su mano. Solo Él posee el poder de dar vida, y la respuesta natural al reflexionar sobre esta verdad debe ser adoración y entrega a Él: “como el barro en la mano del alfarero”, como nos recuerda Jeremías 18:5, así somos nosotros en la Suya.

La segunda mitad de este Salmo nos evoca la historia de los israelitas, quienes fueron rescatados por Dios de Egipto. Sin embargo, en lugar de abrir sus corazones al Señor, decidieron endurecerlos contra Él. En lugar de ofrecer cánticos y melodías de alegría, traían quejas; en lugar de expresar gratitud, se entregaban a la contienda; y en lugar de rendir culto, ponían a prueba su fe. Debido a su obstinación y desvío, se les negó la entrada a la “Tierra Prometida”.

Así que, “si hoy oyes su voz”, ¿Cuál será tu respuesta y la actitud de tu corazón? El reposo del Señor es para aquellos que obedecen y responden con una fe genuina.

Anchor Church • Orlando Baptist Church • Restoration Church of Sanford • Sent Church
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